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La ganadería sostenible es un modelo productivo que busca generar alimentos de manera responsable, contribuir al cuidado del medio ambiente y promover buenas prácticas sociales y económicas en el sector ganadero. En la actualidad, la ganadería intensiva es una de las principales problemáticas ambientales del planeta, ya que se vincula con la deforestación, la emisión de gases de efecto invernadero y la contaminación del agua y del suelo.

Es por ello que es necesario impulsar un cambio de paradigma en este sector, que permita garantizar una alimentación sana y nutritiva para la población mundial, al mismo tiempo que se cuida nuestro planeta.

¿Por qué es importante la ganadería sostenible?

La demanda de productos cárnicos y lácteos se ha duplicado en las últimas décadas, lo que ha llevado a un aumento significativo en la producción de ganado. Sin embargo, este incremento no ha sido sostenible, ya que ha implicado el uso intensivo de recursos naturales como el agua y la tierra, así como un aumento en la emisión de gases de efecto invernadero.

Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), la producción ganadera es responsable de alrededor del 14,5% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero. Además, la expansión de la ganadería intensiva ha llevado a la deforestación de bosques tropicales, lo que ha afectado la biodiversidad y ha acelerado el cambio climático.

Por otra parte, la ganadería sostenible ofrece una serie de beneficios para el medio ambiente, la salud y la economía. En primer lugar, promueve la conservación de los recursos naturales, al fomentar un uso eficiente del agua y la tierra, y reducir el impacto ambiental de la producción ganadera.

También contribuye a la salud de los animales, al promover prácticas de bienestar animal y reducir el uso de antibióticos y hormonas para su engorde. Asimismo, promueve la salud de las personas, al producir alimentos más saludables y seguros, y al reducir el riesgo de enfermedades emergentes.

En el plano económico, la ganadería sostenible puede generar empleo y desarrollo rural, al promover prácticas productivas respetuosas con el medio ambiente y las tradiciones locales.

¿Cómo se puede impulsar la ganadería sostenible?

Para impulsar la ganadería sostenible es necesario actuar en diferentes niveles. En primer lugar, se requiere un compromiso por parte de los gobiernos y los actores del sector agropecuario, para adoptar políticas públicas y estrategias empresariales que fomenten la producción sostenible.

Entre las medidas pueden incluirse la promoción de prácticas agroecológicas, la mejora de la gestión ambiental de las fincas ganaderas, el fomento al uso de tecnologías limpias y eficientes, y el impulso a prácticas de bienestar animal y reducción de químicos.

Asimismo, se requiere un esfuerzo conjunto de los consumidores y la sociedad en general, para promover un cambio en nuestra cultura alimentaria, que incluya hábitos más saludables y sostenibles, así como la valoración de los alimentos producidos de forma responsable y respetuosa con el medio ambiente.

Por último, es necesario fortalecer la investigación y la innovación en el sector ganadero, para desarrollar soluciones tecnológicas y científicas que permitan mejorar la productividad, el bienestar animal y la sostenibilidad ambiental.

¿Qué ventajas ofrece la ganadería sostenible?

La ganadería sostenible ofrece una serie de ventajas, tanto para los productores como para los consumidores y el medio ambiente. Entre ellas se encuentran:

– Producción responsable: La producción ganadera sostenible promueve prácticas responsables en el uso de recursos naturales y la gestión ambiental de las fincas. Esto se traduce en una reducción del impacto ambiental de la producción ganadera y una contribución positiva a la conservación de los ecosistemas.

– Bienestar animal: La ganadería sostenible promueve prácticas de bienestar animal, lo que significa una mejora en la calidad de vida de los animales y una reducción del uso de antibióticos y hormonas para su engorde.

– Alimentación saludable: La producción de alimentos de origen animal de forma sostenible implica el uso de prácticas más saludables y seguras, lo que se traduce en una producción de alimentos de mejor calidad.

– Acceso a mercados: La producción de alimentos de origen animal de forma sostenible se presenta como una oportunidad de acceso a nuevos mercados, que demandan productos producidos de forma responsable y respetuosa con el medio ambiente.

¿Qué retos enfrenta la ganadería sostenible?

A pesar de las ventajas que ofrece la ganadería sostenible, sigue enfrentando importantes retos. Uno de ellos es la falta de información y capacitación sobre las buenas prácticas ganaderas, tanto entre los productores como entre los consumidores. En algunas ocasiones, no se cuenta ni siquiera con tecnologías disponibles para el cuidado del medio ambiente y de los animales.

A ello se suman las barreras económicas, que impiden que ciertos actores del sector puedan adoptar prácticas más sostenibles, lo que exige la presencia del estado y otros entes como proveedores y empresas.

Además, existe una brecha importante en la investigación y la innovación en el sector, lo que limita la capacidad de generar nuevas soluciones tecnológicas y científicas para una producción sostenible.

Importante considerar

La ganadería sostenible es una oportunidad para generar un cambio positivo en el sector ganadero, mejorar el cuidado del medio ambiente y fomentar prácticas productivas responsables y socialmente justas. Sin embargo, su adopción requiere un compromiso conjunto de gobiernos, empresas y consumidores para adoptar prácticas sostenibles y promover una cultura alimentaria responsable y saludable.

Es por ello que resulta fundamental sensibilizar y educar en el tema, desde el sector académico, la iniciativa privada y el gobierno, para poder establecer un diálogo entre todos los involucrados en este proceso, fomentar la adopción de prácticas más sostenibles y contribuir al logro de objetivos globales, como los propuestos en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.

Conclusión

La ganadería sostenible es un modelo productivo que busca garantizar la producción de alimentos de forma responsable, contribuyendo al cuidado del medio ambiente y promoviendo el bienestar animal y la seguridad alimentaria de la población mundial.

Para lograr su adopción es necesario un compromiso por parte de los gobiernos, los actores del sector ganadero y los consumidores, para promover un cambio de paradigma en la cultura alimentaria y fomentar la adopción de prácticas más sostenibles y responsables en el sector.

Es importante sensibilizar y educar a todos los actores sobre las ventajas que ofrece la ganadería sostenible y sobre los riesgos de no actuar en consecuencia, atendiendo a la realidad del sector y del medio ambiente que nos rodea.

Valeria Catillo

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